Se acerca el fin del ciclo escolar y el Catecismo de la Iglesia Católica asegura que todo acontecimiento puede convertirse en ofrenda de acción de gracias. Esta es una oración para dar gracias a Dios por el ciclo escolar que termina.
Querido Dios, hoy me dirijo a Ti con un corazón lleno de gratitud y alegría. Quiero darte gracias por acompañarme durante este ciclo escolar que llega a su fin.
En cada día de estudio, enfrenté desafíos y dificultades, pero Tú siempre estuviste a mi lado, guiándome y dándome fuerzas para seguir adelante. Me diste la sabiduría y el entendimiento necesarios para aprender y crecer en conocimiento.
Hoy, quiero agradecerte por los profesores y maestros que pusiste en mi camino. Ellos compartieron sus conocimientos y dedicaron su tiempo y esfuerzo para enseñarme. A través de ellos, pude adquirir nuevas habilidades y expandir mi horizonte intelectual.
También quiero agradecerte por mis compañeros de clase, quienes fueron mis aliados y amigos durante este ciclo escolar. Juntos enfrentamos retos y compartimos momentos de alegría y camaradería. Gracias por la oportunidad de vivir esta experiencia en comunidad.
Señor, gracias por permitirme tener acceso a la educación. Reconozco que es un privilegio y una bendición poder aprender y crecer intelectualmente. Dame la fortaleza para poner en práctica lo que he aprendido para hacer del mundo un lugar mejor.
Te doy gracias por los logros y éxitos que obtuve durante este ciclo escolar. Cada meta alcanzada fue posible gracias a tu amor y apoyo incondicional. Reconozco que sin Ti, nada de esto hubiera sido posible.
Ahora que este ciclo escolar llega a su fin, te pido con esta oración que me bendigas en mis vacaciones y me guíes en el descanso y el disfrute de este tiempo. Permíteme recargar mis energías y renovar mi espíritu para enfrentar nuevos desafíos en el próximo ciclo escolar.
Gracias, amado Dios, por estar siempre presente en mi vida y por ser mi guía y mi refugio. En Ti deposito mi confianza y mi gratitud. Que tu amor y tu gracia me acompañen siempre.
Amén.
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