Así como Juan Pablo II fue el último Papa electo en el siglo XX, Benedicto XVI fue el primero que arrojó un cónclave en el siglo XXI, asumiendo con ello los desafíos de la Iglesia y de la propia sociedad en el Tercer Milenio.
Además de que varias veces advirtió que los problemas ecológicos ponen en riesgo la vida misma, alertó de que la corriente relativista había cobrado demasiada fuerza.
“Se va construyendo una dictadura del relativismo que no reconoce nada definitivo y que deja sólo como medida última al propio yo y sus apetencias”.
En su libro La sal en la tierra, comenta: “Al hombre moderno, con su consabido escepticismo científico, le parece poco democrático, intolerante, e incluso inaceptable, que nosotros digamos ‘estoy en posesión de la verdad’, o ‘eso no es la verdad, es solo parte de la verdad’”.
Ante esta situación proponía dos antídotos: ampliar los límites de la razón y poner en práctica la caridad, que es la garantía de la verdad del cristianismo. Y apostar por una ética compartida, unos valores comunes.
En cuanto al fundamentalismo, el Papa Benedicto XVI decía que es una falsificación de la religión: “cuando las razones de la fe son dudosas también se falsea la fe… entonces se producen formas patológicas de religiosidad, como, por ejemplo, esas búsquedas de apariciones con mensajes del más allá y otras cosas por el estilo.”
Afirmaba que “el compromiso de la Iglesia y de las religiones es cumplir una purificación de estas tentaciones, iluminar las conciencias y hacer de tal manera que cada uno tenga una imagen clara de Dios.
“Debemos respetarnos unos a otros. Cada uno es imagen de Dios y debemos respetarnos recíprocamente, el mensaje fundamental de la religión debe estar en contra de la violencia”.
Otro tema que frecuentemente abordaba el papa Benedicto XVI era el de las sectas, de las cuales dijo que “atraen a sus adeptos por dinero, ganándose a la gente con medios poco limpios”.
“Las sectas son relativamente inconstantes. Hay grandes movimientos migratorios entre las sectas, y el cambio de una secta a otra también es muy frecuente, pero eso realmente suele ser, casi siempre, el paso previo para abandonar la religión.”
El Santo Padre recibió un baloncesto a manera de obsequio por parte de jugadores de…
¿Cuál es el aporte de la Iglesia Católica en un mundo sacudido por guerras y…
¿Qué podemos aprender de este episodio ocurrido en México? El P. Medel reflexiona sobre lo…
En el marco del Último Informe de Gobierno de AMLO y del inicio de la…
El verdadero Edén es el corazón humano en donde Dios mismo quiere pasear sabiendo que…
Esta web usa cookies.