La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) hizo un llamado a detener la violencia y promover la paz, pues “la historia juzgará con vergüenza, a sabiendas de que un hermano levantó la mano contra su hermano”.
“Los obispos de México hacemos un llamado para detener la violencia provocada por la intolerancia de ideas y la lucha de intereses de unos contra otros“, dice la CEM en un comunicado publicado este miércoles 8 de enero.
Ante la situación de incertidumbre y violencia que vivimos a nivel nacional e internacional, los obispos mexicanos recordaron que la guerra representa siempre una derrota para la humanidad. “No podemos seguir aceptando, mucho menos promoviendo discursos políticos que polaricen a la humanidad o que inciten a la violencia”, dice la CEM.
“Como pastores no podemos permitir la decadencia de la esperanza ante la obscuridad de la guerra y los conflictos, debemos siempre pronunciarnos para que la humanidad y las naciones ejerzan su derecho al diálogo honesto y al noble ejercicio de la diplomacia”, asegura el comunicado.
Los obispos retomaron las palabras del Papa Francisco con motivo de la 53 Jornada Mundial de la Paz: “La guerra se nutre de la perversión de las relaciones, de las ambiciones hegemónicas, de los abusos de poder, del miedo al otro y la diferencia vista como un obstáculo”.
“A nombre de la Iglesia en México afirmamos que no caminaremos bajo el sendero de la violencia y de la guerra, que la historia juzgará con vergüenza, a sabiendas de que un hermano levantó la mano contra su hermano”, asegura el comunicado.
El comunicado finaliza con una plegaria a Dios por la paz y a María por su intercesión en el duro camino de la reconciliación.
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