Los gatos se han convertido parte del paisaje al visitar la Catedral Metropolitana. A estos animalitos se les puede ver deambular tanto en el atrio como en el jardín de los canónigos, y a los más intrépidos por los pasillos del interior del templo.
De acuerdo con el Canónigo Pbro. Luis Monroy, hace 20 años llegaron los primeros felinos a la Catedral, con la finalidad de ayudar al control de las plagas, como ratones, palomas y cucarachas.
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“Ellos como cazadores, nos ayudan a controlar este tipo de animales. Sin embargo, la población de gatos ha aumentado considerablemente y por lo tanto no podemos darles una buena calidad de vida”, mencionó el párroco del Sagrario Metropolitano.
Por ello, como parte de las actividades del Ambiente de Ecología en la Megamisión, se están dando en adopción a 10 gatos, 3 de ellos cachorros y los restantes de poco más de nueve meses.
“Queremos darles un hogar, donde estén bien cuidados y alimentados, lo que una mascota necesita. Son gatitos nobles. También queremos evitar enfermedades, pues la gente de buena voluntad les avienta comida de todo tipo, lo cual es problema para su salud estomacal y a la vez, aumenta el número de roedores y de cucarachas”, explica el Padre Monroy.
Asegura que además de los felinos que ya tenían, han llegado otros tantos, los cuales no están esterilizados, lo cual aumenta rápidamente la población.
“Hace algunas décadas, de acuerdo a los relatos de otros canónigos que ya llevan tiempo en la Catedral, llegaron a habitar más de 40 gatos, y no queremos que eso vuelva a ocurrir”.
“Algunos de los felinos encontraron la manera de pernoctar en la Capilla de San Felipe de Jesús, -a un costado de la Catedral-, incluso uno ‘ya había tomado posesión’ del trono de Iturbide'”, comenta entre risas el Canónigo.
El padre Monroy señala que él mismo ya se ha convertido una especie de “atractivo turístico”, pues la gente se queda viendo cómo llama a los 17 gatos de la Catedral para darles una botana o alguna caricia.
“No son tan melosos como los perros; sin embargo, a su modo, son cariñosos y me siguen mucho porque soy el que los consiento”.
El canónigo señala que los gatos están en perfecto estado de salud y pide a la gente interesada en darles un hogar lo siguiente:
Para mayores informes es necesario comunicarse con el Canónigo Luis Monroy al teléfono: 5585-8195-37.
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