Esta fotografía de una imagen de Jesús que sobresale de las inundaciones en Estados Unidos parece ilustrar la presencia de Dios ante los miles de afectados que ha dejado la temporada de huracanes 2021.
La fotografía, tomada por el fotógrafo Edmund D. Fountain del periódico New York Times, muestra las afueras de la iglesia de San Pío en la localidad de Marreno, Luisiana. En la foto se aprecia el exterior del templo completamente inundado, pero sobre el agua se alza la parte superior de una imagen de Jesús, que parece mirar al cielo.
Las últimas semanas, el norte de América se ha visto afectado por fuertes huracanes. El domingo 29 de agosto Ida tocó tierra en Estados Unidos como huracán de categoría 4, con vientos de hasta 240 kilómetros por hora. Se trata de una de las mayores tormentas en alcanzar el sur de ese país. A su paso, Ida dejó lo que el Servicio Meteorológico Nacional de Nueva Orleans llamó daños devastadores en el sureste de Luisiana.
De acuerdo con datos del Gobierno de Estados Unidos el paso del huracán Ida en la Costa Este causó al menos 18 muertes, consecuencia de las históricas lluvias, las cuales también han afectado otros estados conforme los restos del fenómeno meteorológico han avanzado.
La madrugada de este 2 de septiembre, usuarios de redes sociales compartieron que la ciudad de Nueva York sufrió graves inundaciones en calles y estaciones del metro. Incluso el Aeropuerto internacional de Newark quedó bajo el agua y el servicio ferroviario de la región suspendió la totalidad de sus servicios. La gobernadora Kathy Hochul declaró estado de emergencia en el estado de Nueva York.
Mons. José H. Gómez, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), invitó a unirse en oración y a solidarizarse con los afectados por el huracán Ida.
“Hago un llamado a las personas de buena voluntad para que se unan a mí para orar por la seguridad, el bienestar y la protección de todos en estas áreas afectadas. También oramos de manera especial por los socorristas, los trabajadores de la salud y el personal de emergencia que brindan alivio, consuelo y sanación”, dijo.
“Insto a nuestros fieles católicos y a todas las personas de buena voluntad en todo el país a que se solidaricen con estas comunidades afectadas. Encomendamos a todos nuestros hermanos y hermanas en peligro a nuestra Santísima Madre, y le pedimos su protección continua y su intercesión para consolar a los que sufren”; agregó el también Arzobispo de Los Ángeles.
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